Antes de ayer el INEI presentó su actualización de las cifras de pobreza para el 2009.  Esto era ansiosamente esperado por varios, porque era la validación de los supuestos avances del proyecto de desarrollo que se supone que se está aplicando en el Perú.  Por supuesto que también era esperado por los que todos los años le prenden quince velitas a San Judas Tadeo para que las cifras vayan en retroceso, lo cual era particularmente probable para el año 2009, en el que atravesamos una crisis mundial, y así poder tener el "Exhibit A" de que el capitalismo no es la respuesta.

En todo caso, las cifras de pobreza tiene para ambos bandos.  Por un lado, a pesar de la crisis, se ha logrado reducir la pobreza ligeramente.  Esto, como se explica en este Comentario Diario del IPE, se debe a dos razones.  Por un lado está el impulso del excelente año 2008, en el cual crecimos fuertemente.  Y por el otro está el impacto del crecimiento del gatso público, el cual en buena medida se fue a programas sociales y a destinos pensados a luchar contra la pobreza.

Pero además es muestra de que en el fondo era cierto lo que algunos analistas predecían: Que haber invertido tiempo y esfuerzo a consolidar un sistema financiero sólido (por encima de uno oportunista que se mueve siguiendo a las tendencias del momento) ha rendido frutos y que es algo que debemos mantener.  Esto implica, por ejemplo, mantener la prudencia en las políticas fiscales y monetarias y dejar pasar sin tocar las medidas alocadas y circunstanciales que nos podrían hacer daño a largo plazo.

Por el otro lado, las críticas.  Si bien la pobreza está bajando de 36.2% en el 2008 a 34.8% en el 2009 y la pobreza extrema está bajando de 12.6% en el 2008 a 11.5% en el 2009, hay datos sueltos que preocupan.  Por ejemplo, como lo comentaba el día de ayer @elmorsa en el twitter, que en las zonas en las que hay operaciones mineras la pobreza no se haya reducido.  Eso requiere de una explicación aparte, pero es un cuestionamiento válido.

No dejen pasar el hecho de que "la pobreza" es un concepto abstracto que hay que definir de alguna manera concreta para poder ser medido.  Uno se puede sentir pobre, pero no entrar a la definición que está usando en esta ocasión el INEI.  Pero hay otras muchas formas de seguirle el rastro al desarrollo social peruano.  Por ejemplo, la pobreza se podrá estar reduciendo, pero hay otros muchos temas que siguen mal: inequiedad, educación, salud, desnutrición, administración de justicia, etc.  Eso también hay que verlo por separado.

Finalmente, para algunos estas cifras valen madre, porque "obviamente" el INEI está sometido a los intereses del Gobierno, quien solamente quiere quedar bien presentando cifras de pobreza favorables a su gestión.  Como un cuestionamiento de este tipo es harto razonable, el INEI se ha preocupado por buscar el respaldo de instituciones independientes que garanticen que ha hecho una labor creible.  Aquí el listado de las organizaciones comprometidas.

El INEI, en cumplimiento de su política de transparencia y calidad en la aplicación de metodologías y procedimientos utilizados en la estimación oficial de las cifras de pobreza en el Perú, ha venido trabajando las cifras de la pobreza, en forma conjunta con la Comisión Consultiva para la Estimación de la Pobreza y otros indicadores relacionados, de acuerdo a los estándares internacionales.

Esta Comisión, presidida por el Jefe del INEI, está conformada por representantes de los siguientes organismos internacionales: Banco Mundial (BM), Banco Interamericano de Desarrollo (BID); Institut de Recherche Pour le Développement (IRD) del gobierno francés; Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA). Asimismo, la integran representantes de organismos nacionales tales como: Ministerio de Economía y Finanzas (MEF); Centro Nacional de Alimentación y Nutrición (CENAN); Comisión Interinstitucional de Asuntos Sociales (CIAS) y el Banco Central de Reserva del Perú (BCRP).

También, participan representantes del Consorcio de Investigación Económica y Social (CIES); Grupo de Análisis para el Desarrollo (GRADE); Instituto de Estudios Peruanos (IEP); Mesa de Concertación para la Lucha contra la Pobreza (MCLCP) y representantes de la Pontificia Universidad Católica del Perú y de la Universidad del Pacífico. Así como, investigadores sociales independientes, con reconocida trayectoria nacional e internacional, entre los que se encuentran: Carolina Trivelli Ávila, Javier Escobal D’Angelo, José Rodríguez González, Richard Webb Duarte.

Ahora, todo esto no quiere decir ni de lejos que ya la hicimos.  Faltan muchas cosas por hacer, aquí no cabe el triunfalismo.  Así que hay que seguir tirando para adelante afinando el esfuerzo.