Hay un fenómeno en el periodismo en el mundo, no sólo en el Perú.  No recuerdo su nombre.  Consiste en que en la medida en la que no se reporta lo normal, porque supuestamente no es noticia, sino que solamente se reporta lo que se sale de lo normal, al final la audiencia común termina tomando esa secuencia de noticias fuera de lo normal como si fuera lo normal.  Por ejemplo, cuando un periódico solamente reporta los crímenes cometidos en un distrito.  Jamás le dedica una cara a un titular como "Hoy no robaron a nadie en este distrito".  Sería una locura, por muchas razones.  La principal de ellas: Eso no vende periódicos.

Con esto no me voy a poner a defender a CADE 2012.  Por supuesto que es cierto que muchos van solamente a hacer relaciones públicas.  Eso es obvio desde que los ves de lejos.  Por supuesto que muchos van solo por las juergas que hay apenas acaba la última conferencia del día.  Basta ir a *la* discoteca a la que iba la mayoría en la noche para que eso quede claro.  Y así etc, etc.  Pero de ahí a ningunear el evento... Es algo malintencionado.

Es como cuando Michael Porter dijo miles de cosas, una de las muchas cuales fue una crítica al modelo económico peruano.  Por supuesto que los medios levantan lo que está fuera de lo normal y no mencionan en lo más mínimo los alabos que le da al crecimiento económico peruano en la misma conferencia.

Nuevamente: No digo que CADE sea el paraíso de la inocencia y el compromiso social.  Pero es un espacio importante.  Sí es un lugar en el que se discuten los problemas del país desde otra perspectiva.  Y lo que es más importante: Es un espacio necesario.  Necesitamos un espacio en el que los empresarios se reúnan y negocien su perspectiva de la problemática del país, así como las posibles soluciones.

¿Que ha desviado su rumbo? Sí, de hecho.  Durante el evento entrevisté a la abogada Cecilia Blume, que se mandó con una crítica bien fuerte a CADE 2012.  Aquí se las incrusto. (De hecho, en la columna que escribe para Correo, comenta que para ella este CADE representó sentimientos encontrados por la ausencia de compromisos concretos).  Chequeen lo que cuenta sobre su padre regresando de la primera CADE.

Y sí, pues.  Definitivamente.  Yo he ido a dos: El de este año en Arequipa y el de Cusco.  Y entiendo la crítica.  Estoy de acuerdo con Blume en que se debe comprometer al público a tareas concretas para el año, asignando responsables, y en la siguiente CADE presentar los avances de esos compromisos, a ver si así otros se animan a unirse al esfuerzo.  De hecho.  Sin lugar a dudas.

Pero de ahí a decir que la preocupación por la educación en CADE "ya no se cuenta porque bien sabemos que es un cliché sin ninguna consecuencia práctica", como se comenta en esta columna, es bastante preocupante.  No solamente porque los empresarios sí meten harta plata a tratar de hacer algo por la educación en el Perú y sí se preocupan activamente del asunto (a ese columnista quizás se le pasó toda la labor que hacen Fundación BBVA, Fundación Telefónica, Instituto Apoyo, etc... Si quieres más ejemplos Perú 2021 convenientemente ha abierto un portal para compartir experiencias), sino además porque es la clase de posiciones basadas en una serie de noticias anormales que son presentadas como el escenario normal, lo que comentaba al comienzo.

Consideren esto. ¿Qué fue lo que han oído de la participación de Luis Miguel Castilla en CADE 2012? Seguramente ese comentario que hizo criticando la moral de los empresarios peruanos.  Pero también defendió la imagen de los empresarios en general (aquí), criticó al Estado que no tiene presencia en donde las empresas se instalan (aquí y aquí), criticó la falta de coraje en políticos que no apoyan una reforma del Estado (aquí y aquí), pidió un cambio de rumbo en el gobierno (aquí y aquí), comentó su compromiso personal con el Perú (aquí, aquí y aquí), denunció una ausencia de voluntad de diálogo entre Estado y empresa (aquí y aquí).  Al final, la imagen que uno se lleva es que Castilla fue a CADE a jalarle las orejas al empresariado peruano, lo cual no es cierto.

Nuevamente (por qué ya sé cómo funciona esto): No digo que todos los empresarios sean bacanes (pun intended) o que CADE sea lo máximo.  Por supuesto que hay empresarios malintencionados y que CADE deja que desear.  Pero de ahí a decir que todos son unos corruptos (¿les suena conocido? ¿quién usa esa expresión para referirse a los políticos?) o que CADE es un antro, hay mucho trecho.

(Dibujito de arriba: http://es.juanelo.net/)