El circo parlamentario (30): Distritos electorales, compensación por contaminación y restauración de iglesia
Sólo porque las historias que nos han tenido distraído en la prensa en estos días se pueden repetir cuando sea, sigamos buscando congresistas que sepan medir lo que le cuestan sus iniciativas a la sociedad. Si no entiendes bien lo que estoy haciendo, chequea el último post que colgué al respecto. La idea es chequear proyectos de ley presentados por congresistas para ver quién sí cumple con hacer el análisis costo beneficio que se le obliga a los congresistas a hacer cuando presentan una iniciativa. O sea, quiénes lo hacen bien, me refiero.
Siguiendo en orden alfabético...
Hugo Carrillo, nacionalista. Este pata le ha puesto su nombre a 47 proyectos de ley en la legislatura 2012-2013. Una que se supone que es de su autoría es la Ley que crea los distritos electorales para los pueblos quechuas, aymara y amazónicos. Se puede leer el texto de esta iniciativa en este enlace. El análisis costo beneficio está en la página 11. Solo tiene dos párrafos.
1. Un punto a favor del congresista Carrillo es que reconoce que hay un costo asociado que no es solamente gasto. No obstante, lo disimula diciendo que éste se asumirá recién en el 2016, por lo tanto no hace falta considerarlo, con lo cual naturaliza la crítica a los congresistas de que solamente se preocupan por el tiempo que les toca estar en el cargo y que después el país qué importa.
2. Nuevamente hay que tener claro que no estoy cuestionando la necesidad política o social de aplicar este cambio a nuestro sistema electoral. No obstante, que la creación de distritos electorales cuesta es indiscutible. Por lo menos el congresista Carrillo lo acepta, aunque no lo cuantifica. Por lo menos no sale jalado completamente.
Juan César Castagnino, de Perú Posible. Puso su nombre en 18 proyectos de ley. Una de su autoría es la Ley que establece compensación solidaria para poblaciones afectadas por la contaminación de los ríos generada por actividades extractivas y ubicadas fuera de la jurisdicción de la actividad. En este enlace está el texto. El análisis costo beneficio está en la página 5. Es de un solo párrafo.
1. Este congresista hace un esfuerzo sobrehumano para confundirlo todo: impuestos, costos, redistribución, gasto, etc. Insisto: Un ciudadano normal no tiene por qué saber la diferencia entre estos conceptos. Pero un congresista sí, porque toda su chamba gira alrededor de esto (se supone).
2. Nuevamente, no juzgo la necesidad de una norma como ésta, pero el caso es que claramente sí genera costos adicionales. Dice que no pasa nada porque el dinero que se usará será un porcentaje del canon, pero el caso es que ese dinero son recursos que se dejan de usar para otras cosas. ¿Es este objetivo más importante que lo que están haciendo las autoridades subnacionales con ese dinero? Supongo que sí. No lo sé. El congresista Castagnino debería decirnoslo. Pero no lo hace.
Francisco Ccama, fujimorista. Le ha puesto su nombre a 20 proyectos. Uno de su supuesta autoría es la Ley que declara de interés y necesidad publica la puesta en valor, el mejoramiento y la conservación de la iglesia colonial de San Pedro y San Pablo de Zepita - Puno. El texto está en este enlace. El análisis costo beneficio está en la página 5 y es de un solo párrafo.
1. Entenderán que hay que estar un poco desconectado de la realidad para sugerir que el mejoramiento y la conservación de una iglesia colonial no cuesta nada. Lamentablemente el congresista Ccama dice que esto no genera gasto alguno al Estado y que eso es todo lo que importa. Nada más importa.
2. Mal, pues, congresista Ccama, que busca declarar que "se haga" algo y ni se preocupa por averiguar cuánto va a costar ni de dónde saldrá el dinero. Por lo menos reconoce que la restauración de la iglesia en cuestión va a costar algo, aunque no dice cuánto.
(Dibujito de arriba: http://criscoh.xanga.com)