Empresas estatales otra vez (10): A pesar de todo, Petroperú sigue siendo Petroperú
Hace un tiempo escribí un post en el que comentaba cómo algunas personas se molestan de que empresas extranjeras estén explotando nuestros recursos naturales. Y que una alternativa sería que el Estado mismo lo haga, como en otros países sucede con algunos recursos mineros (Chile, Colombia, etc). Obviamente la condición tácita para que eso sea una opción es que se haga bien. Con criterios modernos, con transparencia, aprendiendo de los errores del pasado, etc...
Presentando a Petroperú. Todo aquel con más de 20 años de edad recordará el antro de corrupción que siempre ha sido. Ni qué decir del despilfarro de ineficiencia que ha tendido a ser (no siempre lo es, ciertamente). Pero no se dejen engañar con el discurso de que ahora Petroperú no será corrupta o ineficiente "porque nosotros somos buenos". El mundo real no funciona así. En el mundo real si quieres que te crea que las cosas van a ser distintas en una organización como ésa, tienes que hacer un cambio institucional. Hacer algo que indique que las cosas van a ser distintas.
Ojo: No *decir* que las vas a hacer distintas. *Hacerlas* distintas.
Esta última aclaración me parece harto pertinente, porque desde el cambio de gobierno los que han asumido el control de Petroperú están con la cantaleta de que ahora todo será distinto, porque van a imitar el modelo de Petrobras: Emitir acciones de la empresa a través de la Bolsa de Valores de Lima, de tal manera que entren inversionistas privados y como accionistas presionen para que se apliquen criterios razonables a lo que hace. En la CADE del año pasado (hace como 10 meses) entrevisté a Humberto Campodónico que nos insistía que eso se hacía ahoritita, que ya salía (de hecho, se molesta cuando le repito que qué garantía tenemos de eso). Hasta ahora no han dado ni un solo paso en esa dirección. Ni uno. Por el contrario, en un toque les explico cómo es que nos hemos alejado de ese objetivo, a pesar de todo lo que andan pregonando.
Y acuérdense que si no cruzamos ese umbral, Petroperú sigue siendo exactamente la misma institución vulnerable a la corrupción y a la ineficiencia de siempre. Nada ha cambiado, más allá del floro de que ahora todo será distinto "porque nosotros somos buenos". Si sientes la tentación de discutirme esto, primero tómate unos segundos para recordar que bajo esta administración Petroperú se hizo socia de PDVSA, el foco de corrupción de uno de los países más corruptos del mundo. No es precisamente una señal muy positiva que digamos.
Ahora, tengan en cuenta que la cantaleta de que Petroperú va a salir a la Bolsa viene desde el gobierno de Alan. Era una sugerencia que ya hace tiempo se venía manejando, porque precisamente bien implementada soluciona buena parte de nuestros problemas. El actual gobierno asumió ese discurso, pero no lo ha respaldado con acciones. En enero de este año dijo que en abril se hacía. Llegó abril y nada. Lo postergaron a fin de año. Y habrá que creerles, a lo mejor sale. Pero hay señales para preocuparse. Como esto de que primero saldrá para la ciudadanía en general. Porque no sé si te habrás enterado, pero tú quieres invertir en Petroperú. Según Campodónico, el 65% de la población peruana desea adquirir inversiones de esa empresa. Y no sé si ese 65% sabe en lo que se estaría metiendo, pero tienen razón en que es una buena opción: Es una empresa que nunca va a quebrar, hace básicamente lo que quiere, puede obligar a otras empresas a que sean sus socios, hace aparecer dinero de la nada, etc. Es una excelente inversión. Pero eso no era lo que queríamos como país.
Ésa no era la idea de la salida a la Bolsa. La idea es que inviertan en Petroperú empresas, bancos, grandes entidades con capacidad de análisis y de presión, que hagan fuerza para que se hagan las cosas bien y que sepan qué le conviene a la institución. Que la próxima vez que alguien sugiera asociarse con un foco de corrupción como PDVSA, en la junta de accionistas alguien haga bronca y que deje en claro que eso no se hace, que alerte a la prensa de lo que se pretende hacer. Que entren muchos pequeños es, no sé, tierno y harto afinado con criterios e ideales políticos que pueden ser nobles, pero no ayuda mucho que digamos en el objetivo de transparencia y eficiencia que se suponía que se perseguía con ese cambio. De hecho, no ayuda en nada.
Así que ahí están arruinando la jugada. Pero peor aún. Campodónico en varias oportunidades dice que están retrasando la salida a la Bolsa porque tienen que terminar de definir proyectos importantes en los que se está metiendo la empresa... No obstante, si salir a la Bolsa fuese una prioridad, no se metería a nuevos proyectos hasta que el proceso de transformación de Petroperú no estuviese listo. Así que ahí tienen más motivos de preocupación.
Ahora, con respecto a esa pintoresca idea que han tenido de obligar a empresas que concursan a concesiones que sean socias de Petroperú... Hay tanto que decir con respecto a por qué ésa es una pésima, pésima idea, que mejor lo dejo para otro día.
(Dibujito de arriba: http://peterdeseve.blogspot.com/)